aproximarse

Hoy tengo tanto de sollozo como de dudas, también alcanzo algunas decepciones; tengo ese aislamiento interno que a veces me petrifica y me llena de arrepentimientos sin ánimo de lucro...es la verdad, nunca recibí beneficios.
Los bordillos me recuerdan las "caídas" y los descampados toda ropa bajada y unas nalgas frías por la época...sientes el golpe pélvico y llega un momento donde no distingues cuál es el abuso ni la resistencia, callas ante un posible consentimiento de lo que dudas sea una buena relación.
Estoy sobrevalorando mis días a un extremo que ya no sé si mis nervios son sucedáneos al baile de fin de curso de aquellos films americanos, donde las muchachas y los muchachos giran sin tener vértigo a nada.
No soy trapecista pero estoy subida en un rascacielos, y desde aquí todo se observa y se detalla más profundo, cada vez más... pero ¡ojo! como dije en anteriores escritos nací de entre el más consistente abismo, y a eso le llamo yo confianza y seguridad en lo que uno cree y construye...aún tenga vagando hace un tiempo mi autoestima no dejo de gritarla para que esté de vuelta a mis adentros, y eso también es parte de mi lucha.
Esta mañana se puso en contacto la abogada, empezamos a preparar a los testigos, a las testificaciones, eso hace temblar a mi entrepierna e incluso patalear ante lo que se aproxima, pero calma (aunque tenga que esforzarme por hallarla) voy a confiar en poder destrenzar la soga por muy amarga que se anude.