Tan calmados,Tan serenos;
como los llevaba probando en sueños
hacía años, ellos también los hacían y no por ello se cumplieron,pero:
en soledad,
en anhelo,
con deseo,
en fuego,
contigo pero sin ti (yo ardiente)
Nunca fugitiva hubiese querido en ese momento.
Hace una semana
volví a creer en la existencia de la luz lunar sobre nuestras mandíbulas;
En una sola dirección fija:
la de tus ojos,
esos que reflejan en mi alma algo condensado,
a cada instante que existes
aunque la vida pase sin nosotros juntos,
y mi mente no te olvide,
como mi mirar tampoco...
Te perpetuaré al son de flores agraciadas
sin destinatario,
hasta que me beses la clavícula y,
sienta tu lengua en mi cuerpo trazando la palabra amor,
tan húmeda como lo estaba en aquella gloria nada vanidosa,
colosal,
de callejón y de entrepierna..
furtiva y sin testigos.
Tú y yo sin que exista un viento en ti
hasta que desees unirte a mí,
en mi pobreza aún tan poco amorosa.
Fiel depredador:
-¿Querrías ser mi bestia?-
¿Las bestias utilizan palillos?
ResponderEliminarCreo recordar que no son muy fanáticas del Sushi ni del BarÇa... pero -¡oye!- que lo mismo tropiezan con pelos en la lengua referente a otros menesteres y han de echar mano a ellos... por aquello de quitarse lo que sobra y estorba... -¿qué opinas?- cosas peores hemos visto en esta andrajosa y tan empalagosa vida... el regaliz, por ejemplo ;) :)
ResponderEliminarNada sobra o estorba cuando son otros los menesteres y utilizamos la lengua para los prodigios. Después de amar es inconsecuente cualquier higiene sexual...
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