...sicalipsis en una penetración flagelada:
En este nicho todo escuece
Despavorido el canto de un mirlo
La flora que frena el hedor de los muertos
Se respira lo funesto de la ocasión.
Hemos muerto por lo que nos daba placer
Concedí sin contratos gemidos artificiales
Pasiones como bestias sin fauces
A lomos de genitales venideros
Rasguños en las promesas de un "nunca para siempre"
En lo alto del cabecero unas siniestras cuerdas:
Ya no atas.
Cualquier vieja historia de furcias y meretrices;
No lo duden, señoritas y señoras también.
Al igual que la noche todo lo ocultas;
Un viejo noctámbulo suplicando en un regazo.
Poseo unas nalgas arañadas...
Alguien pudo hacerme daño.
Yeguas, caballos...
Todos montan, todos trotan.
Caballeros y señoras... Todos montan, todos trotan.
ResponderEliminarse vuelven demasiado ecuestres, aunque se ausentasen más de una vez en sus clases de hípica sexual.
EliminarLo importante es que huelan a caballo y a establo cuando hagan el amor...
Eliminarsudor! ¡bello sudor en los encuentros furtivos!
EliminarSiempre he creído al poema en mitad del orgasmo, pero nunca apuesto por el amor en mitad del placer.
Llámame incrédula...
El amor es un juego de descreimiento en mitad de la nada... Sueño con todos los orgasmos que acallan poemas.
EliminarPor aquí paso para saludarte y agradecer tu comentario dejando constancia de tu visita.
ResponderEliminarLa equitacion siempe fue un buen deporte... :D
Besitos
Siempre quieren galopar... :)
EliminarMuchas gracias por dejar tu huellita, y espero que suceda unas cuantas veces más.
Besazos!!
A mi me gusta la doma
ResponderEliminar.... cuando es un juego consentido
Un besito ,deditos inquietos.
Ya echaba de menitos tu opinión al respecto :)
ResponderEliminar¡eso es, siempre que sea por ambas partes deseada tanto la apuesta como la carrera!
un besazo mi bonita